¿Indulto para un monstruo del pop?
Trump abre la puerta a perdonar a Diddy, mientras las víctimas claman justicia
"El verdadero carácter de una sociedad se mide por cómo trata a sus miembros más vulnerables." — Mahatma Gandhi
Mientras el juicio federal contra el productor musical Sean “Diddy” Combs avanza en Nueva York, las redes sociales hierven, los testimonios estremecen... y la política se inmiscuye. Las acusaciones contra Diddy son gravísimas: crimen organizado, prostitución forzada, tráfico sexual. Y de ser declarado culpable, podría pasar el resto de su vida en prisión.
Pero entonces, como si la historia fuera escrita por un guionista enloquecido, aparece en escena Donald J. Trump. El presidente, en declaraciones recogidas por The Root en un artículo firmado por Shanelle Gena, se pronunció ambiguamente sobre la posibilidad de indultar a Diddy. Afirmó: “Sin duda, analizaría los hechos si creyera que alguien fue maltratado, le caiga bien o no.”
"Los crímenes contra mujeres y niñas no son excesos del poder: son su verdadera cara cuando no se le pone freno." — RCJ
Trump reveló también que en el pasado existía una cercanía entre él y el rapero. “Antes me tenía mucho cariño, pero creo que cuando me presenté como candidato político, esa relación se rompió”, declaró, para luego matizar que no ha seguido el caso de cerca. Una respuesta que, lejos de tranquilizar, despierta indignación: ¿se plantea indultar a alguien acusado de hechos tan atroces... sin siquiera informarse?
El escenario es inverosímil, pero real. Y no sería la primera vez: los indultos políticos han protegido criminales con poder, dinero o influencia. El riesgo es claro: que un juicio por tráfico sexual se convierta en moneda de cambio electoral o prueba de lealtades rotas. Pero no se puede permitir que la figura de un presidente sirva para legitimar el horror.
"No se trata de quién conoces, sino de lo que hiciste. Y si lo que hiciste destruyó vidas, la justicia no debe temblar." — Sonia Sotomayor
RCJ Digital
Las víctimas de Diddy —si se comprueba su culpabilidad— no necesitan otro espectáculo político, ni otro millonario con amigos en el poder. Necesitan justicia. Necesitan verdad. Y necesitan que el mundo, incluidos los que alguna vez se sentaron a su mesa, no les den la espalda.
Lo decimos sin ambages:si Diddy es culpable, debe pagar por sus crímenes. Ni perdón anticipado, ni manos lavadas. Porque el horror no se negocia. Se condena.
“El poder de los hombres ricos no puede seguir siendo una garantía de impunidad.” — Tarana Burke, fundadora del movimiento MeToo “Escuchar que podría ser indultado nos hace sentir desechables.” — Comentario de una presunta víctima, citado en foros estadounidenses “No se juzga una carrera, se juzgan los actos. Y los actos aquí son monstruosos.” — RCJVOCES QUE RESISTEN