De drones y advertencias: Rusia intensifica su ofensiva aérea sobre Ucrania
90 aparatos no tripulados, dos misiles balísticos y un mensaje de resistencia
"Cuando el poder desmedido se alza en los cielos, la dignidad se atrinchera en el suelo".
En la madrugada del viernes 30 de mayo de 2025, los cielos ucranianos volvieron a ser surcados por el estruendo invisible de la guerra. Dos misiles balísticos —posiblemente del modelo Iskander-M o su versión norcoreana, el KN-23— y noventa drones, entre ellos los temidos Shahed iraníes, fueron lanzados por Rusia en su más reciente embestida aérea. La defensa ucraniana, en una lucha de ingeniería y voluntad, logró interceptar 56 de estos drones.
La información fue confirmada por la Fuerza Aérea ucraniana y difundida por AFP, en un parte que resuena como un parteaguas estratégico en la guerra. La ofensiva, además de desplegar aparatos explosivos, incluyó drones señuelo diseñados para agotar y confundir a las defensas aéreas enemigas.
"La guerra moderna se libra tanto con drones como con miedo; y es el miedo lo que busca anular primero el atacante".
Las autoridades locales han confirmado impactos en al menos doce puntos geográficos, aunque el reporte oficial mantiene hermetismo sobre su ubicación. Entre las ciudades afectadas se encuentran Izmail —el estratégico puerto ucraniano en el Danubio—, Járkiv —donde un terminal de trolebuses quedó destruido— y Sumi, donde estallaron incendios a raíz de las explosiones.
“No hay necesidad de entrar en pánico, estamos utilizando todos los sistemas de defensa aérea disponibles, además de helicópteros y aviones. Vamos a seguir luchando”, declaró una fuente militar ucraniana que optó por el anonimato. Mientras tanto, el gobernador regional de Odesa, Oleh Kiper, detalló que en Izmail, las instalaciones portuarias y una central postal fueron alcanzadas, aunque no se reportaron víctimas.
"Cuando las ciudades no pueden dormir, los pueblos aprenden a resistir despiertos".
El analista militar Franz-Stefan Gady ha advertido que las capacidades defensivas de Ucrania están siendo estiradas al límite: “Las defensas aéreas de Ucrania no pueden garantizar la protección de todas las ciudades contra los persistentes y sofisticados ataques rusos”. Sin embargo, en cada voz anónima que se niega a ceder al terror, hay una grieta en la narrativa del poderío ruso.
VOCES QUE RESISTEN
RCJ Digital: Mientras los misiles cruzan el cielo y los drones siembran su eco mecánico, Ucrania defiende algo más que su territorio: defiende su capacidad de mirar hacia el mañana sin bajar la cabeza. Esta no es solo una guerra de armamento, sino de alma. Y en ese plano, aún no han sido derrotados.
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