CONTANDO LA NOTICIA DE OTRA MANERA
El Trinity College rompe vínculos con Israel por Gaza: la ética académica se alza
"La neutralidad favorece al opresor, nunca a la víctima." – Elie Wiesel
En una decisión que marca un precedente ético en el ámbito académico internacional, el Trinity College de Dublín (TCD), una de las universidades más prestigiosas de Irlanda y de Europa, ha anunciado el corte total de sus relaciones institucionales con el Estado de Israel. Lo hace, según ha comunicado su Consejo de Administración, por las “violaciones continuas del derecho internacional y humanitario” en la Franja de Gaza.
"Donde la injusticia se convierte en ley, la resistencia se convierte en deber." – Bertolt Brecht
La medida fue comunicada a los estudiantes a través de correo electrónico por el presidente del consejo, Paul Farrell, quien subrayó que la decisión responde a las conclusiones de un grupo de trabajo creado tras las protestas estudiantiles del año pasado, cuando el campus fue parcialmente bloqueado durante cinco días en señal de rechazo a la ofensiva israelí sobre Gaza.
Según AFP, la universidad ha confirmado que dejará de mantener “lazos institucionales con el Estado de Israel, las universidades y las empresas con sede en ese país”. Asimismo, dejarán de firmarse contratos de suministro con empresas israelíes y no se establecerán nuevas relaciones comerciales mientras persistan las violaciones mencionadas.
Farrell ha sido contundente: la ruptura se mantendrá mientras Israel no modifique su postura en el conflicto. Se trata, sin duda, de una declaración poderosa desde el ámbito del saber, donde el conocimiento se convierte también en conciencia y compromiso.
"La educación no es llenar un balde, sino encender un fuego." – William Butler Yeats
VOCES QUE RESISTEN
Cuando una universidad levanta su voz, se tambalean los cimientos del silencio. El gesto del Trinity College no es solo político, es profundamente humano. Frente a la indiferencia de muchos gobiernos y al desinterés de instituciones internacionales, emerge una voz desde las aulas que clama por justicia y coherencia ética. ¿Cuántas más deberán actuar para que cese la impunidad?
Cuánta tinta se ha derramado para acusar, pero qué difícil es demostrar lo que tanto se grita.
