Hallan muerto al exministro ruso Román Starovoit tras su destitución
Una bala, un ministro, un silencio incómodo en las esferas del Kremlin
El exministro de Transporte ruso, Román Starovoit, fue hallado muerto a las afueras de Moscú apenas horas después de su destitución por el presidente Vladímir Putin. La noticia, difundida por EFE, indica que el político fue encontrado con una herida de bala en su vehículo particular en la localidad de Odintsovo. Las autoridades barajan el suicidio como principal hipótesis.
“La investigación está estableciendo las circunstancias de la muerte”, informó el Comité de Instrucción ruso en su canal oficial de Telegram. Starovoit, de 53 años, había asumido la cartera de Transporte en mayo de 2024 tras dejar la gobernación de la región de Kursk.
“Nadie comete suicidio por odio a la vida, sino por incapacidad para soportarla.” – Emil Cioran
Según EFE, medios rusos apuntan a que Starovoit habría utilizado una pistola honorífica Makárov, regalo institucional en 2023. Sin embargo, el canal Mash de Telegram contradice la versión, afirmando que el ministro celebró una reunión esa misma mañana, se despidió y luego se marchó a casa, donde fue hallado muerto.
La historia reciente complica el relato oficial. En agosto de 2024, tres meses después de que Starovoit dejara Kursk, las tropas ucranianas lograron ocupar parte de esa región, siendo expulsadas recién en abril de este año. El gobierno local estaba entonces en manos de Alexéi Smirnov, quien fue arrestado por corrupción en abril pasado.
“Lo importante no es lo que dicen los documentos, sino lo que callan los silencios del poder.” – Hannah Arendt
Según fuentes judiciales, Starovoit podría haber enfrentado hasta 20 años de cárcel por delitos de fraude y malversación, tras las declaraciones incriminatorias de otros políticos como Smirnov. La Fiscalía había intensificado sus investigaciones en las últimas semanas.
El mismo día del hallazgo, Putin nombró como nuevo titular de Transporte a Andréi Nikitin, hasta entonces viceministro. El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, aseguró que el decreto de destitución no indicaba pérdida de confianza, lo cual, según él, “es significativo”.
VOCES QUE RESISTEN
La muerte de Starovoit deja preguntas suspendidas en el aire, tan punzantes como el disparo que lo silenció. ¿Se trató de un suicidio inducido por presiones? ¿Fue un mensaje cifrado para quienes, dentro del aparato estatal, contemplan hablar más de lo debido?
Rusia sigue construyendo su narrativa entre las sombras. La rotación de ministros, las detenciones por corrupción, y los súbitos "suicidios" marcan una cadencia inquietante: el poder, cuando se siente amenazado, no castiga solo con el olvido, sino con la desaparición. La historia reciente del Kremlin es un espejo oscuro donde se reflejan las tensiones de un régimen que se siente más cómodo con los muertos que con los disidentes.
“Donde todos piensan igual, nadie está pensando.” – Walter Lippmann
“El poder no corrompe. El miedo corrompe… quizás el miedo a perder el poder.” – John Steinbeck
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