“Es fácil pedir perdón”: la bachata que revive pasiones, triunfos y cicatrices
“Quien no comprende una mirada, tampoco comprenderá una larga explicación.” – Proverbio dominicano
Hay canciones que no sólo se oyen. Se sienten. Se recuerdan. Se vuelven testimonio. Así está ocurriendo con “Es Fácil Pedir Perdón”, el sencillo del dominicano Ronald Núñez que, a más de dos décadas de haber iniciado su carrera, vuelve a romper cifras, listas y corazones.
Loma de Cabrera, un rincón de República Dominicana, fue su punto de partida. Desde allí emergió una voz que hablaba de amor, de pérdidas, de ese orgullo que muchas veces impide decir lo que el alma clama: “Perdón”. Con su primer álbum De Corazón a Corazón (2002), y el tema “No Te Puedo Perdonar”, Ronald se consolidó como una promesa real de la bachata tradicional. Pero no se quedó en la nostalgia: evolucionó. Supo crecer sin abandonar la raíz.
El 13 de marzo de 2025, la nueva versión de “Es Fácil Pedir Perdón” fue relanzada, esta vez bajo el sello internacional Moondance Entertainment Group & Records. La respuesta fue inmediata: #1 en Spotify en República Dominicana, más de 3 millones de visualizaciones en TikTok y 4 millones de reproducciones en YouTube. Pero más allá de las cifras, hay algo más poderoso: la canción se ha convertido en un espejo emocional para quienes callaron por orgullo o por miedo.
La crítica ha coincidido en que este tema, más que una simple pieza musical, es un manifiesto afectivo. La voz de Núñez —entrenada con los años pero intacta en sentimiento— se entrelaza con una producción moderna que no traiciona la esencia. En ella se percibe la mano de maestros como Mártires de León, Robinson Hernández y Divisito Paredes, así como letras pulidas por compositores de alto calibre: Daniel Monción, Omar Geles y Miguel Bravo.
En declaraciones a medios locales, Ronald afirmó: “Esta canción es para quien alguna vez supo que había fallado y no supo cómo decirlo. Para los que no se atreven, para los que callan con el alma rota.”
Lo cierto es que su voz ha encontrado nuevo eco. Nuevas generaciones que no lo conocían se han apropiado del tema. Lo versionan, lo bailan, lo lloran. Y es que pedir perdón, aunque fácil en teoría, sigue siendo una de las gestas más complejas del alma humana.
VOCES QUE RESISTEN
“No es fácil pedir perdón, pero es aún más difícil vivir con la culpa.” —RCJ
Ronald Núñez no solo canta. Resiste. En un mundo donde lo desechable triunfa, él se reinventa. En una industria que margina lo íntimo, él lo vuelve himno. Que su bachata vuelva a lo alto no es solo una hazaña musical: es un acto de memoria emocional, una victoria del sentimiento sobre la estrategia, del amor sobre el algoritmo.