Jorge Glas condenado de nuevo por corrupción: 13 años más de cárcel
La justicia ecuatoriana insiste en cerrar las grietas de la impunidad
El exvicepresidente ecuatoriano Jorge Glas fue sentenciado de nuevo por un caso de corrupción y recibió este lunes una condena de 13 años de prisión e inhabilitación de por vida para ejercer cargos públicos, según dictaminó la Corte Nacional de Justicia. El caso involucra el uso indebido de fondos públicos destinados a la reconstrucción de dos provincias tras el potente terremoto de 2016.
La jueza Mercedes Caicedo, encargada de leer la sentencia, denunció que los recursos recaudados mediante impuestos y contribuciones ciudadanas fueron destinados a “construcciones inservibles, inutilizadas e innecesarias”, en claro desprecio por la ley de Solidaridad y, sobre todo, por las víctimas del desastre.
El peso de la historia y la memoria de los damnificados
Glas ya se encuentra en una prisión de máxima seguridad cumpliendo penas anteriores de seis y ocho años por otros casos de corrupción, uno de ellos compartido con el expresidente Rafael Correa, quien actualmente está prófugo. Este nuevo fallo lo inhabilita de por vida para ejercer cargos públicos y le retira sus derechos de participación política por 25 años.
Además, se le impone el pago de una multa de 28.800 dólares y una indemnización solidaria de 250 millones de dólares junto a otro exministro, en reparación de los daños materiales e inmateriales ocasionados.
Cuando el pasado sigue presente en la política
Glas fue separado de su cargo al inicio del gobierno de Lenín Moreno tras ser procesado en el caso Odebrecht, un escándalo que sacudió al continente. Esta nueva sentencia acentúa las heridas de un país aún sacudido por la corrupción política y por la tragedia natural que dejó miles de damnificados.
“El precio de desoír a la ética es pagar con la dignidad de todo un pueblo”, escribió alguna vez el pensador italiano Norberto Bobbio.
“Quien roba en nombre del Estado roba dos veces: a la ley y a la esperanza.” —RCJ
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