La otra manera de contar la noticia
La moda se esfuma, el miedo viste las vitrinas vacías por represiòn migratorias
La moda de Los Ángeles, corazón latente de la economía textil, luce hoy desolado. Las redadas migratorias impulsadas por la administración Trump han vaciado sus calles, clausurado ilusiones y sumido a miles de comerciantes en el temor y la ruina.
“Nuestras ventas cayeron 80%. Lo que nos salva es el envío a domicilio”, confiesa Nayomie Mendoza, dueña de Cuernavaca’s Grill, testigo de cómo la acera frente a su restaurante pasó del bullicio al silencio.
“El miedo siempre está dispuesto a ver las cosas peor de lo que son.” —Tito Livio
El barrio, normalmente abarrotado por turistas y trabajadores latinos, ha quedado como un escenario suspendido. Redadas, helicópteros, cierres tempranos. Lo que debía ser verano, se volvió invierno para la esperanza.
“Esto es probablemente peor que la pandemia”, afirma Mendoza. Y no lo dice sola. Manuel Suárez, comerciante con tres décadas de presencia en el barrio, sentencia: “En la pandemia había ventas. Ahora, ni eso”.
“Cuando una ley aplasta más que protege, la justicia se convierte en amenaza.” —RCJ
La noticia ha sido documentada por Newsweek, mostrando cómo el miedo se ha infiltrado hasta en los rincones más cotidianos: los clientes entran, compran y salen a toda prisa. Nadie quiere arriesgarse.
Los comerciantes han creado redes de vigilancia con walkie-talkies, avisos verbales y observadores en los techos. La palabra “¡La migra!” resuena como un disparo seco que paraliza el alma. Ya no se trata de un barrio comercial, sino de un enclave sitiado.
“El que niega hospitalidad a otro ser humano, niega humanidad a sí mismo.” —Séneca
En medio del caos, los latinos –documentados o no– sufren. “Las operaciones no solo golpean a extranjeros, sino a industrias enteras”, advierte Mendoza. El incendio de enero aún no había sido superado cuando llegó esta nueva oleada de miedo institucionalizado.
Los Ángeles, ciudad santuario, vive hoy bajo una contradicción violenta: ofrece protección simbólica, pero es recorrida por oficiales de inmigración que aseguran, sin titubeo: “Vamos a ir a todos lados, a la hora que queramos”.
“Quien siembra miedo, cosecha vacío.” —RCJ
En este rincón de California, el miedo es la nueva prenda de temporada. Y el distrito de la moda, un termómetro de cómo la política puede cortar hilos invisibles que sostenían mucho más que escaparates: sostenían vidas.
“Aquí lo que va a pasar es que vamos a estar jugando al gato y al ratón. A ver quién se cansa primero.” —Vendedor anónimo ✨ Dale play
#LatinoConEstilo
VOCES QUE RESISTEN
“Aquí lo que va a pasar es que vamos a estar jugando al gato y al ratón. A ver quién se cansa primero.” —Vendedor anónimo
“En este desfile, el único diseño es el del silencio impuesto.” —RCJ
“Las ciudades que persiguen a sus trabajadores se marchitan por dentro.” —Eduardo Galeano
No hay comentarios:
Publicar un comentario